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La insuficiencia renal en personas mayores requiere atención y un seguimiento continuo. También conocida como fallo renal, puede tener un impacto significativo en la calidad de vida de los adultos mayores. Entender la enfermedad puede ayudarnos a proporcionar un cuidado adecuado. En este artículo, explicamos qué es la insuficiencia renal en personas mayores, sus causas, síntomas y las opciones de tratamiento disponibles.
¿Qué es la insuficiencia renal?
La insuficiencia renal se da cuando los riñones pierden su capacidad para filtrar adecuadamente los desechos y el exceso de líquidos de la sangre. Esta pérdida de función puede ser aguda o crónica.
La insuficiencia renal aguda (IRA) es de inicio rápido y, a menudo, reversible con el tratamiento adecuado. Se caracteriza principalmente por una rápida disminución de la función renal, generalmente en un período de días o semanas.
Por otro lado, la insuficiencia renal crónica (IRC) es un deterioro gradual de la función de los riñones que progresa con el tiempo. En ocasiones, puede ser necesario un tratamiento de diálisis o, incluso, trasplante renal.
¿Cuáles son las causas de la insuficiencia renal en personas mayores?
La insuficiencia renal en nuestros adultos mayores puede estar causada por una gran variedad de factores. Entre las causas más comunes se encuentran las enfermedades crónicas como la diabetes y la hipertensión, que son prevalentes en el colectivo de la tercera edad. Estas condiciones pueden dañar gradualmente los riñones y concluir en una insuficiencia renal crónica.
Insuficiencia renal aguda (IRA)
En estos casos, las causas más comunes son:
- Deshidratación severa. La falta de líquidos puede reducir el flujo sanguíneo a los riñones.
- Infecciones graves. Infecciones que afectan todo el cuerpo y que pueden terminar dañando a los riñones.
- Medicamentos. El uso prolongado de algunos fármacos puede causar un fallo renal.
- Bloqueo del tracto urinario. Las piedras en los riñones o los tumores pueden bloquear el flujo de orina.
Insuficiencia renal crónica (IRC)
Las principales causas de este tipo de insuficiencia renal serían:
- Diabetes. El azúcar elevado en la sangre puede dañar los riñones pasado un tiempo.
- Hipertensión. La presión arterial alta puede afectar a los vasos sanguíneos de los riñones.
- Enfermedades renales. Como la glomerulonefritis, que se produce al inflamarse las unidades de filtración de los riñones.
- Infecciones recurrentes. Por ejemplo, las infecciones urinarias crónicas pueden derivar en una afección renal.
Síntomas de la insuficiencia renal en personas mayores
Reconocer los síntomas de la insuficiencia renal en sus etapas iniciales puede ser algo complejo. Hay que tener en cuenta que son señales que pueden ser sutiles y confundirse con otros problemas de salud comunes en personas mayores. Sin embargo, a medida que la función renal se deteriora, los síntomas se vuelven más evidentes. Veamos cuáles son los síntomas habituales de la insuficiencia renal.
- Fatiga. Sentirse constantemente cansado y sin energía.
- Pérdida de apetito. La disminución del interés por la comida y la hiporexia (pérdida de apetito), es un problema común en personas mayores con insuficiencia renal, pudiendo derivar en una reducción de peso.
- Náuseas y vómitos. También relacionado con lo anterior, las molestias estomacales pueden reducir sensiblemente la ingesta de alimentos.
- Hinchazón. Edema en las piernas, tobillos, pies como consecuencia de la retención de líquidos.
- Orina espumosa. Indica la presencia de proteínas en la orina.
- Orina oscura o con sangre. Habría que observarlo, porque también podría ser señal de afección renal.
- Dolor de espalda o costado. Dolor persistente en el área de los riñones.
En etapas más avanzadas, la insuficiencia renal puede causar síntomas más graves, como:
- Dificultad para respirar. Debido a la acumulación de líquido en los pulmones.
- Confusión o problemas de concentración. La acumulación de toxinas en el cuerpo puede afectar la función cerebral.
- Calambres musculares, especialmente en las piernas.
- Cambios en la piel. Es frecuente ver la piel deshidratada, seca y con picazón.
Es importante prestar atención a estos síntomas y buscar atención médica si se presentan, ya que un diagnóstico temprano puede mejorar notablemente el pronóstico y la calidad de vida.
Tratamiento de la insuficiencia renal
El tratamiento de la insuficiencia renal en pacientes de edad avanzada depende de la causa subyacente, el grado de daño renal y la salud general de la persona. Las opciones de tratamiento varían; desde cambios en el estilo de vida, pasando por medicamentos específicos hasta terapias más intensivas como la diálisis.
Cambios en el estilo de vida
Adoptar un estilo de vida saludable es fundamental para manejar la insuficiencia renal y prevenir su avance. A continuación, te dejamos algunas recomendaciones en este sentido:
- Dieta equilibrada. Seguir una dieta baja en sodio, proteínas y potasio para reducir la carga sobre los riñones. De ahí, la importancia de realizar un seguimiento dietético y control nutricional a los afectados.
- Ejercicio regular. Mantenerse activo contribuye a controlar la presión arterial y mejorar la salud cardiovascular.
- Control de la diabetes. Es importantísimo, tener unos niveles de glucosa en sangre dentro del rango recomendado.
- Monitorización de la presión arterial. Controlar y mantener a raya la hipertensión con la ayuda de medicamentos y cambios en la alimentación.
Medicamentos
El uso de medicamentos es esencial para tratar las causas que provocan la insuficiencia renal y aliviar los síntomas. Algunos ejemplos de este tipo de fármacos, son:
- Antihipertensivos. Son fármacos que ayudan a relajar los vasos sanguíneos, reduciendo su presión arterial.
- Medicamentos para la diabetes. Para mantener los niveles de glucosa en sangre bajo control.
- Diuréticos. Para reducir la retención de líquidos y el edema.
- Suplementos de calcio y vitamina D. Estos suplementos contribuyen a una buena salud ósea.
Diálisis
En casos de insuficiencia renal avanzada, la diálisis puede ser necesaria para reemplazar la función de los riñones. Existen dos tipos básicos de diálisis:
- Hemodiálisis. Se realiza en un centro de diálisis y utiliza una máquina para filtrar los desechos y el exceso de líquidos de la sangre.
- Diálisis peritoneal. Se puede realizar en casa y utiliza el revestimiento del abdomen (peritoneo) para filtrar la sangre.
Trasplante de riñón
Para algunos pacientes, un trasplante de riñón puede ser la mejor opción. Este procedimiento implica reemplazar el riñón dañado con un riñón sano de un donante. Aunque el trasplante puede ofrecer una mejor calidad de vida, no todos los pacientes mayores son candidatos adecuados para este procedimiento debido a factores de salud y disponibilidad de donantes.
En nuestras residencias, contamos con programas de prevención y cuidado de personas mayores con insuficiencia renal. Ofrecemos un servicio asistencial de atención continuada, que incluye la monitorización regular de la salud renal y el ajuste de tratamientos según las necesidades individuales de cada persona. Además, nuestro equipo de nutricionistas trabaja en estrecha colaboración con los médicos para garantizar una dieta equilibrada y nutritiva que ayude a mantener la salud renal y general de nuestros residentes.
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